Cuidado en el hogar son aportes para la sociedad patrimonial

La Corte Suprema de Justicia de Colombia ha emitido un importante pronunciamiento al negar una tutela presentada por un ciudadano que alegaba una vía de hecho en el proceso de liquidación de una sociedad patrimonial con su excompañera permanente. Este caso arroja luz sobre la necesidad de abordar las cuestiones de género en las relaciones familiares y de pareja, especialmente en lo que respecta a la distribución de bienes. Cuidado en el hogar son aportes para la sociedad patrimonial

Reconociendo la Diversidad de Contribuciones

El accionante argumentó que su excompañera no había realizado ningún aporte económico a la sociedad y que, por lo tanto, no debía tener derecho a una parte del patrimonio común. Sin embargo, la Corte Suprema hizo hincapié en que no se pueden desestimar las contribuciones no monetarias, como las labores de cuidado y el mantenimiento del hogar, que son esenciales para el funcionamiento de una comunidad de bienes. Este enfoque reconoce el derecho de la excompañera permanente a una distribución justa.

La Perspectiva de Género en Juzgar las Relaciones de Pareja

La perspectiva de género desempeña un papel crucial en estos casos. La Corte destacó la importancia de aplicarla en situaciones de relaciones familiares y de pareja, especialmente al determinar la existencia de una unión marital de hecho y la consiguiente sociedad patrimonial. La valoración de los aportes, tanto económicos como no económicos, debe tener en cuenta los roles y estereotipos de género que pueden influir en la construcción del patrimonio común.

Evolución de los Roles de Género

Históricamente, se asignaron roles de género específicos en la sociedad, incluyendo en las parejas tradicionales, donde se esperaba que el hombre fuera el proveedor económico mientras que la mujer se encargaba de las responsabilidades domésticas. Aunque la sociedad ha avanzado hacia la igualdad de género, estos roles aún persisten en muchos aspectos, lo que a menudo conlleva a la subestimación de las contribuciones no económicas realizadas por las mujeres.

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El Valor de las Labores Domésticas y de Cuidado

La lista de tareas que involucran el cuidado del hogar y la familia, como cocinar, limpiar, cuidar de los niños y las personas mayores, y llevar a cabo tareas esenciales, es esencial para el funcionamiento de una casa. A menudo, este trabajo «invisible» se realiza a tiempo completo y sin remuneración. Sin embargo, su importancia económica, cultural y social no debe subestimarse, como destacó la Corte.

Superando Estereotipos y Discriminación

A pesar de los esfuerzos institucionales por promover la igualdad de género, los roles de género tradicionales siguen influyendo en la percepción de los aportes en dinero como más valiosos que las contribuciones no monetarias. Esto puede llevar a situaciones injustas, como la administración unilateral del patrimonio o la obtención de una porción desproporcionada en la disolución de la sociedad conyugal o patrimonial, lo que a menudo resulta en violencia económica.

Una Sociedad Equitativa

La decisión de la Corte Suprema de Justicia de Colombia subraya la necesidad de abordar los aspectos de género en la distribución de bienes en casos de sociedades patrimoniales entre parejas. La igualdad de género y la valoración de todas las contribuciones, ya sean económicas o no, son fundamentales para lograr una distribución justa y equitativa de los activos y pasivos en una sociedad patrimonial. Esto representa un paso importante hacia la erradicación de los estereotipos de género y la promoción de una sociedad más justa y equitativa para todas las personas involucradas en una relación de pareja.