Anif calcula que la reforma a la salud aumentaría la pobreza

En los últimos meses, el enfoque de las discusiones en torno a las reformas gubernamentales se ha centrado en sus implicaciones fiscales. Específicamente, las reformas de salud y pensiones han sido objeto de intensos debates en términos de su impacto económico y social. Sin embargo, en los últimos días, el centro de estudios económicos Anif ha arrojado luz sobre otro aspecto crítico: el potencial impacto en la pobreza del país.

El presidente de Anif, Mauricio Santa María, ha señalado que las reformas propuestas podrían tener un impacto significativo en los indicadores de pobreza monetaria y pobreza extrema. Según sus estimaciones, estos indicadores podrían aumentar alrededor de 1 punto porcentual si se considera el costo de «gasto de bolsillo» que los ciudadanos incurren al pagar por sus servicios de salud bajo las reformas propuestas.

Santa María ilustró este punto comparando la proporción del gasto de bolsillo en salud en Colombia con otros países. Mientras que en Colombia, los hogares destinan alrededor del 15% de su presupuesto para cubrir gastos de salud, en la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) el promedio es del 19.2% y en países latinoamericanos alcanza el 38.6%. Esta disparidad refleja que los ciudadanos latinoamericanos deben destinar una parte significativa de sus recursos para afrontar los costos de salud, en comparación con Colombia.

La pobreza extrema aumentaría 1 punto

Santa María destacó que el aumento del gasto de bolsillo en salud, como se propone en la reforma, podría resultar en un incremento de casi 1.5 puntos porcentuales en la pobreza monetaria, y un aumento de 1 punto en la pobreza extrema. Esto pondría en riesgo la meta gubernamental de reducir la pobreza al 9.6%, llevándola a un nivel de pobreza monetaria extrema de 13.4%.

En un escenario hipotético en el que el gasto de bolsillo en salud se duplicara, los cálculos de Anif sugieren que la pobreza monetaria podría elevarse al 40.8%, afectando a aproximadamente 20.36 millones de personas, en comparación con los 19.6 millones en 2021. Similarmente, la pobreza monetaria extrema aumentaría de 6.11 millones a 6.61 millones de ciudadanos.

Anif también ha expresado preocupaciones sobre el enfoque de la reforma de salud propuesta por el Gobierno. Santa María señaló que la reforma se centra en modificar aspectos que ya funcionan en el sistema de salud, mientras que no prioriza cuestiones esenciales como la escasez de médicos en el país. Esta escasez, con solo 3.8 médicos por cada 100,000 habitantes, afecta la calidad y accesibilidad de la atención médica.

«No es el peor sistema de salud»

El presidente de Anif desafió la noción de que el sistema de salud colombiano sea uno de los peores del mundo, citando datos que indican un aumento significativo en la cobertura de seguros de salud a lo largo de los años. En 1993, solo el 4.3% de la población más pobre estaba asegurada, en contraste con cerca del 90-95% de cobertura en todos los quintiles de ingresos en 2021.

Además, Santa María destacó las diferencias de gestión entre departamentos y municipios en el sistema de salud y cuestionó la propuesta de la reforma de centralizar más el control estatal sobre estos aspectos.

Finalmente, se abordó el crecimiento continuo del gasto en salud a lo largo de los años, vinculado a factores como el envejecimiento de la población, el aumento de la demanda de servicios y el incremento de precios de medicamentos. Santa María advirtió que la introducción de problemas fiscales adicionales podría complicar aún más esta situación.

El Extracto LitiApp

El análisis de Anif arroja luz sobre el posible impacto de las reformas de salud en la pobreza, enfatizando la importancia de abordar cuidadosamente estos aspectos en la toma de decisiones. Además, se subrayan las preocupaciones sobre la reforma propuesta y se plantea la necesidad de considerar más ampliamente los desafíos y oportunidades del sistema de salud en Colombia.